![]() |
Así lo vivió Mostaza, eufórico, detrás del alambrado. |
Luego del auspicioso debut el pasado sábado, goleando 3-0 a Independiente Rivadavia, el conjunto de Pergamino tenía otra prueba de fuego en su lucha por escapar a la zona roja. Y la superó.
Bien parado en el fondo, y sin perder la calma, Douglas esperó su momento para golpear y lo hizo mediante una pelota parada, en la que Gioda la bajó y Quintana sólo tuvo que empujarla de cabeza,
A partir de ahí, el equipo de Mostaza se paró para jugar de contra, así estiró la ventaja al comienzo del segundo tiempo a través de Pablo Mazza, que venía de convertir un golazo en la fecha anterior.
Almirante, inofensivo y carente de ideas, encontró el descuento mediante un penal ejecutado por José Luis García, pero no le alcanzó, ya que sobre el final, Alba de contragolpe cerró el partido con un golazo.
Los de Giunta, siguen hundidos en su irregularidad sin encontrar el rumbo. Una vez finalizado el encuentro los hinchas, con la paciencia colmada, fueron a 'pedir explicaciones' al vestuario, Por su parte el Fogonero, se llevó un triunfo vital y esperanzador para Pergamino. Ganó los dos partidos que disputó desde la llegada de Merlo y se ilusiona con permanecer en la categoría. Y sí, se siente el efecto Mostaza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario